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martes, 3 de marzo de 2015

RICARDO MOROS URBINA, SESQUICENTENARIO DE SU NATALICIO

SESIÓN CONJUNTA DE LA ACADEMIA DE HISTORIA DE CUNDINAMARCA Y EL CENTRO DE HISTORIA DE NEMOCÓN, CON OCASIÓN DEL SESQUICENTENARIO DEL NATALICIO DEL PINTOR Y ESCRITOR NEMOCONENSE RICARDO MOROS URBINA.


RICARDO MOROS - AUTORETRATO -.


El sábado 7 de marzo, la Academia de Historia de Cundinamarca y el Centro de Historia de Nemocón, adelantarán en dicho municipio, una sesión conjunta sobre las 10:00 de la mañana, en la sede del Instituto Comercial Ruperto Aguilera León, con ocasión de conmemorarse el próximo 27 de marzo,  el sesquicentenario del natalicio del pintor y escritor nemoconense Don Ricardo Moros Urbina, el discurso de orden estará a cargo del Académico de Número y Ex – Presidente del Centro de Historia de Nemocón Doctor Germán Caballero Herrera.


Casa natal de Ricardo Moros Urbina y actual sede del Instituto Comercial Ruperto Aguilera León
recinto en el cual se llevará a cabo la sesión conjunta de la Academia de Historia de Cundinamarca y el
Centro de Historia de Nemocón, el próximo sábado 7 de marzo a las 10:00 de la mañana. 

Ricardo Moros Urbina, nació en el municipio de Nemocón el 27 de marzo de 1865, hijo de Sesáreo de Moros y Teresa Urbina, realizó sus primeros estudios en el colegio que conducía en Nemocón don Ricardo Carrasquilla, posteriormente se desplazó a la capital en donde continúo sus estudios bajo la tutoría del maestro Carrasquilla.  

Moros Urbina es una de las figuras más representativas en el campo del dibujo y la pintura de finales del siglo XIX y comienzos del XX en Colombia, parte de su obra se encuentra condensada a partir del número 33 del papel periódico ilustrado, publicación fundada y dirigida por don Alberto Urdaneta; igualmente es uno de los cofundadores de la Academia Colombiana de Historia en el año de 1902.

Precisamente en el número 99 del papel periódico ilustrado, publicado el 1 de septiembre de 1886, Ricardo Moros Urbina,  escribió un artículo titulado “Algo sobre Nemocón”, el cual ilustró con un excelente dibujo que reproduce la esquina occidental de la plaza de Nemocón, los siguientes son varios apartes del escrito sobre su tierra natal:

ALGO SOBRE NEMOCÓN. A trece leguas de la capital de la República, y á tres de la ciudad de Zipaquirá  en la vía de la carretera que conduce al Estado de Boyacá, y llamada del Noroeste, se halla Nemocón, pacífico y tranquilo rodeado de verdor por la lozanía de sus campos y sembrados, y poseedor de las ricas minas de sal tanto tiempo libremente explotadas por lo naturales.

“La población está graciosamente situada al extremo noreste de la Sabana, en una pequeña ensenada ó estrecho valle, que alegran y fertilizan dos riachuelos afluentes del Bogotá; el viajero lo contempla á lo lejos pintoresca y risueña, medio oculta en un ángulo de los empinados Andes, como si despreciara el espléndido horizonte que le brinda la llanura, para recogerse melancólica en medio de dos hermosas colinas, buscando la paz que le brinda la agreste soledad. Allí ostenta sus casa blancas y agrupadas, semejando mullidas plumas, que contrastan con el verde musgo y parecen un nido de palomas entre las rocas, ó una rosa caída de la corona de una ninfa, y que vino á ser el oportuno adorno en un ángulo de la inmensa alfombra de verdor.   

“…(…)…

“Nemocón significa lamento ó rugido del león; en este pueblo, como en casi todos los de origen indígena, ya no se encuentra la raza pura sino mezclada, y apenar hay individuos en quienes se hallen ó reconozcan algunos rasgos ó facciones propias de los antiguos moradores; no conservan ninguna de sus antiguas tradiciones, y lo mismo se puede decir en cuanto á sus costumbres.

Esquina occidental de la Plaza de Nemocón - Dibujo de Ricardo Moros Urbina
Tomado del Papel Periódico Ilustrado No. 99 de 1 de septiembre de 1886.

“…(…)…

“De los 6,000 habitantes con los que cuenta hoy Nemocón, una tercera parte vive del laboreo de las minas de sal, de cal y carbón, y de su comercio; el resto, casi en su totalidad, vive de la agricultura y cría de ganados, para la cual es de notarse la excelencia de sus pastos.

“Las minas de sal explotadas por el Gobierno, producen un término medio de 800,000 kilogramos al año, que vienen á ser una renta anual de cerca de $ 100.000, como se verá por lo que produjo en años pasados.

“…(…)…

“A más de sus minas, posee este pueblo una buena iglesia recientemente construída, varios paseos públicos, entre ellos el de la quinta y jardín de Aposentos, y las rocas de Suesca, en el vecino pueblo de este nombre.

“Tiene también aguas termales; y hacia su lado oriental suelen encontrarse algunas esmeraldas. Como este pueblo ocupaba un gran puesto en la Nación Muisca como plaza comercial, eran muchas las gentes que desde distintos y lejanos puntos acudían allí en consecución de sal, que cambiaban por mantas de algodón, tejidos de plumas, algún oro y esmeraldas.


Don Ricardo Moros Urbina. 

“…(…)…

“Pronto éste, como tantos otros pueblos, saldrá de ese mortal letargo en que los ha sumido nuestras odiosas guerras fratricidas, pues el nuevo sistema político nos brinda un horizonte sereno y tranquilo para la sociedad, y de paz y progreso para toda Colombia. Estemos seguros de que Nemocón es uno de los primeros en aprovecharse de los beneficios de la paz, y que progresará por sus riquezas naturales y por el carácter de sus moradores laboriosos y honrados.

“El grabado que aparece en este número representa la esquina occidental de la plaza.

Ricardo Moros.
Bogotá, Marzo de 1886”.   (Fin del texto).



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